Una fría noche en Caldas, en el restaurante "Trigo y Aromas", se celebró un nuevo encuentro de Filoparchando, un espacio donde la filosofía se entrelaza con el diálogo distendido. Bajo la tenue luz que iluminaba el lugar, y con el reconfortante aroma de la comida en proceso de cocción impregnando el ambiente, los asistentes se dispusieron a explorar una cuestión esencial: "¿Qué nos motiva a vivir?".
La velada comenzó con una intervención poético-musical a cargo de los Juglares de la Montaña, quienes presentaron su nuevo tema, "El tango que aletea en mis oídos". La pieza, cargada de una nostalgia evocadora y una belleza melódica profundamente conmovedora, preparó el terreno emocional para la reflexión filosófica que seguiría. Las palabras y las notas musicales se entrelazaron en una introducción que resonó con la búsqueda de sentido, invitando a todos los presentes a abrir su mente y corazón a la pregunta que flotaba en el aire.
Una vez finalizada la intervención musical, el profesor Andrés Acosta inició la conversación filosófica. Con una cadencia tranquila y una profundidad innegable, el profesor llevó a los asistentes a través de las ideas de grandes pensadores como Albert Camus, Erich Fromm.
Durante el diálogo, se dedicó un espacio especial a conversar sobre el libro escrito por el propio profesor Acosta, "La esperanza necesaria". En su obra, el profesor explora la esperanza como una fuerza fundamental para vivir, una actitud activa que nos permite enfrentar la incertidumbre y transformar las dificultades en oportunidades de crecimiento. Esta noción resonó profundamente con la pregunta central de la noche, generando un rico intercambio de ideas entre los asistentes.
La conversación fluyó con naturalidad, creando una atmósfera de complicidad y reflexión. Aunque la noche avanzaba, el ambiente continuaba cargado de preguntas, deseos por comprender, y un extraño pero reconfortante sentimiento de pertenencia a algo más grande.
